Alguna vez te has imaginado cómo es una sociedad en la cual las mujeres están al mando?? Si lo has hecho, este libro responderá a muchas de tus preguntas acerca del cambio de roles entre ambos géneros; pero si nunca has tenido esa inquietud…mmmm….continua leyendo, recuerda que siempre se aprende algo nuevo.
Para los Mosuos el matrimonio es conocido como “axia” o matrimonio andante, cada uno vive en su casa y el hombre visita por las noches a la mujer con la cual hizo una cita, ellos nunca podrán ser dueños de las propiedades, únicamente pueden trabajar en ellas, tampoco pueden habitar dentro de la finca, a menos de que tengan lazos sanguíneos con la matriarca, ya sean hermanos, tíos o hijos.
Se preguntaran que pasa con los padres y abuelos, pues bien, ellos deben vivir en casa de sus madres y no tienen derecho a obtener casa propia.
Ahora bien, quiero aclarar que este libro no busca fomentar el feminismo ni denigrar la importancia de las actividades que realizan los hombres, mucho menos su presencia en la sociedad. Únicamente pretende comprender la funcionalidad de una sociedad diferente a la nuestra: un matriarcado.
Listo…iniciemos con nuestro recorrido hacia dicho lugar…
Loshui, pequeña aldea ubicada junto al lago Lugu , localizada al sur de China, esta aldea esta habitada por alrededor de veinticinco mil personas, las cuales son conocidas como Mosuos, aquí las mujeres se encargan, además de las labores del hogar, de administrar el dinero, trabajar en los cultivos y en la cría de animales, también son quienes reciben herencias y preservan los apellidos.
Para los Mosuos el matrimonio es conocido como “axia” o matrimonio andante, cada uno vive en su casa y el hombre visita por las noches a la mujer con la cual hizo una cita, ellos nunca podrán ser dueños de las propiedades, únicamente pueden trabajar en ellas, tampoco pueden habitar dentro de la finca, a menos de que tengan lazos sanguíneos con la matriarca, ya sean hermanos, tíos o hijos.
Se preguntaran que pasa con los padres y abuelos, pues bien, ellos deben vivir en casa de sus madres y no tienen derecho a obtener casa propia.
Todo lo contrario a lo que pasa con las mujeres, ellas al llegar a la adolescencia – trece años para ser exactos- obtienen un sitio reservado, un cuarto dentro de la finca de la madre, el cual se vuelve en un lugar para la intimidad, aquí exclusivamente puede entrar quien la joven desee y cuando ella lo disponga. En la puerta del cuarto hay un gancho de madera, allí cuelga la gorra el compañero que ella elige para que la visite esa noche, la gorra es una señal de que la joven se encuentra ocupada y no desea ser molestada.
En la sociedad Mosuo solo se llevan a cabo tres celebraciones, la primera es el día de nacimiento, la segunda es cuando las mujeres llegan a la adolescencia y la tercera el dia en que un habitante fallece; tanto en la primera como en la tercera celebración la persona no disfruta del momento ni es consciente de lo que está sucediendo, es por ello que para las mujeres es muy importante celebrar su transición de niña a mujer. Dicha celebración se lleva a cabo en la casa de la madre y solo participan las mujeres – los hombres pueden asistir pero no participan en la misma- aquí las amigas más cercanas a la familia regalan vestimentas a la joven, la madre le coloca un tocado y la llave de su nuevo cuarto, con lo cual culmina la celebración.
Bien queridos lectores les dejo por el momento, la semana siguiente continuaremos con nuestro pequeño viaje a el último matriarcado del mundo.
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